Chile comenzó ayer su participación en la Copa del Mundo Sudáfrica 2010 y lo hizo con un triunfo por 1 a 0 ante la selección de Honduras. Tras el partido los chilenos se lanzaron a las calles a festejar y se produjeron algunos disturbios en la ciudad de Santiago. Los mayores incidentes se dieron en la Plaza Italia, a donde se habían concentrado unos 5 mil hinchas de la selección, que pudieron ver los partidos en pantallas gigantes del paseo Ahumada, la plaza de la Constitución y la Vega Central.
En cuanto a los disturbios el coronel Jorge Fernández, prefecto de Fuerzas Especiales señaló que “se produjo una situación de desorden a raíz del lanzamiento de botellas tanto a personal de Carabineros como transeúntes y vehículos. Frente a agresiones estamos obligados a intervenir”. “Quiero aprovechar de pedirle a la gente que nosotros no tenemos ningún inconveniente en las celebraciones, pero aquí llega gente ebria que viene ocasionar problema que no desea que la gente que viene de buena fe a celebrar lo haga en buena forma”, agregó Fernández.
En la acción de las Fuerzas Especiales fueron arrestados cerca de 30 personas por ataques en contra de sus efectivos y civiles, además de destrozos en paraderos. Otra veintena de personas fueron arrestadas en un operativo realizado por Carabineros en las cercanías de San Ignacio con la Alameda por incidentes en buses del transporte colectivo. Según los Carabineros, una vez comprobada la identidad de los cerca de 60 detenidos estos serán puestos a disposición de la Fiscalía Centro Norte. El próximo partido de la selección chilena será ante Suiza el próximo lunes.